Color en fachada con metal expandido
El color es lenguaje, emoción, estupor: con el metal estirado se puede ir más allá de los “colores disponibles” e imprimir una fuerza distintiva y caracterizante para cada proyecto.
Mimetismo cromático de fachada
El uso del metal expandido para los revestimientos de las fachadas es una solución cada vez más común entre empresas y profesionales del sector. La razón de este éxito deriva de la alta potencialidad expresiva y comunicativa de este tipo de material. Si hablamos del aspecto puramente estético de un proyecto, el metal expandido garantiza una ampliación de la rosa cromática disponible. Esto es un factor muy importante, ya que la elección del color es uno de los aspectos más delicados de la realización de un proyecto: el color elegido para la fachada comunicará una serie de emociones distintas, que pasan así a construir su carácter. Elegir colores tornasolados e iridiscentes, por ejemplo, garantizará originalidad y transmitirá un sentido de creatividad. A su vez, los colores clásicos, neutros, comunicarán profesionalidad y rigor.
Tomemos como ejemplo la fachada en metal expandido visible en el cuerpo de oficinas de la estación ecológica de Bois de Bay: se puede hablar de mimetismo cromático, ya que el uso del color según la técnica tono sobre tono permite atenuar el impacto visual causado por una envolvente muy extensa. Como explicaremos con más detalle en el apartado siguiente, el metal expandido hace además de filtro y de pantalla contra los agentes externos: serán la medida y el tipo de malla elegidos los que decreten el grado de permeabilidad visual.
El metal estirado como escudo protector
La decisión de utilizar el color sobre las fachadas de las construcciones deriva de la voluntad de salvaguardar el trabajo realizado: la capa de color garantizará de hecho a la fachada una mayor durabilidad, ya que estará revestida con una especie de escudo protector, de filtro que garantizará al revestimiento una vida más larga.
La aplicación de paneles en metal expandido garantiza protección contra la acción de los eventos atmosféricos. Además, en caso de que el panel de chapa se coloque como revestimiento de una fachada ventilada, se obtendrá también un aumento del confort termohigrométrico en el interior de los espacios. Por este motivo, la elección del tipo de acabado a adoptar debe estudiarse en detalle. En efecto, hay una gran diferencia entre los espacios exteriores y los interiores, tanto en lo que se refiere a la exposición a los agentes corrosivos, como en cuanto a habitabilidad: el revestimiento de la fachada debe ponderarse teniendo en consideración estos aspectos.
No es raro, de hecho, que, a causa de las características corrosivas del entorno, sea necesario aplicar tratamientos específicos, estudiados para reducir los daños de los elementos contenidos en el aire, como, por ejemplo, el ciclo marino. Este particular proceso de recubrimiento consiste en la aplicación de varias manos de pinturas y barnices de distintos tipos (epoxídicas y poliuretánicas) sobre áreas en las que previamente se ha eliminado el polvo: estas distintas capas de pintura acaban por crear un espesor capaz de brindar una protección adicional a la fachada de que se trate.
Diseño atractivo y modernidad con las mallas metálicas 3D
El uso del metal expandido en fase de realización de un proyecto se le aconseja a todos aquellos que buscan algo que sea innovador, capaz de asombrar gracias a su modernidad, y al diseño cautivador. Las conformaciones tridimensionales de las mallas presentes en el metal expandido crean de hecho reflejos, transparencias, espacios por donde se filtra la luz, capaces de dar al ambiente una atmósfera realmente única y elegante. La luz reflejada, en particular, logra realzar la trama del metal expandido para ir al encuentro del fondo de la materia.